Una de las grandes incógnitas surgidas de las investigaciones relacionadas al tranvía en la ciudad de Santiago de Chile, ha sido la fecha exacta en que dejaron de circular estos viejos carros por sus calles, especialmente los pertenecientes a la Empresa de Transportes Colectivos del Estado (ETC del E o ETCE), no obstante a que después de su cierre, una pequeña línea particular -el Ferrocarril Eléctrico Santiago Oeste- siguió prestando servicios en la ciudad.
El cierre de la última línea de la estatal parece haber pasado desapercibida dentro de una ciudad, en la que los últimos carros eran vistos, en palabras de Ramón Lira, como fantasmas y sonámbulas figuras mecánicas que corrían como avergonzados, confundidos, cabizbajos y hasta se podría decir y asegurar, “abochornados”.
Salvo el caso de Concepción, donde la Compañía Eléctrica de Concepción habían dejado de operar entre 14 y el 21 de noviembre de 1941 por motivos económicos, el cierre de las líneas de tranvías en Santiago y Valparaíso, era una decisión que, tácitamente, se había tomado a fines de la década de 1940, con el objetivo de modernizar la flota de transporte público de las grandes ciudades del país, mediante su recambio por líneas de autobuses y trolebuses, a través de la creación de la Empresa Nacional de Transportes Colectivos, y luego, a partir de 1953, de la Empresa de Transportes Colectivos del Estado, decisión que se ejecutaría de manera progresiva.
Así las cosas, la ejecución de este plan, conllevaría el cierre, primero, del sistema de tranvías de Valparaíso, hecho que se encuentra documentado en la prensa y en los libros de la época, y que se concretaría el 30 de diciembre de 1952. Ramón Lira, dedica un pequeño capítulo en su obra “Los viejos tranvías se van” a los “últimos tranvías del puerto”, relatándolo de la siguiente forma:
Y sucedió que una noche, que se podía catalogar de histórica en algún Álbum de los Recuerdos de Valparaíso, fue la noche precisa que corrió el último tranvía por sus calles, para luego retirarse a su habitual Depósito, y no salir de él nunca jamás otro igual. Esta “noche triste” para los carros porteños, fue la del martes 30 de diciembre de 1952 (…) fue el tranvía nº 505, el último de todos ellos que corrió (…) esa última noche del servicio tranviario en el primer puerto del país, como homenaje al público en esta postrera ceremonia de este último carro, la última vuelta del recorrido la efectúo como despedida, tocando íntegramente todo el trayecto sus campanas de alarma. Iba recogiendo a todos los pasajeros que viajaban todos medios asombrados y asustados, porque todos viajaron en él completamente gratis como recuerdo de tan especial y singular ocasión.
En el caso de Valparaíso, se sabe que la clausura del servicio de tranvías, se producía como consecuencia de la inauguración del servicio de trolebuses en dicha ciudad al día siguiente, el miércoles 31 de diciembre de 1952, lo que era anhelado desde hace tiempo, pues se consideraba a los carros como “su principal defecto y molestia”.
En el caso de Santiago, el cierre de las líneas estatales de tranvías resultaron más lentas, especialmente porque su sistema era más grande que el de Valparaíso, y a su vez, pues sus unidades requerían ser reemplazadas por un número más o menos equivalentes de trolebuses y microbuses.
Para el año 1958, las líneas que quedaban en operación en Santiago eran las siguientes:
Hay cierta unanimidad en las fuentes documentales respecto a que el cierre de la última línea ocurrió el año 1959, pero ha sido difícil confirmar la fecha exacta, pues aparentemente fue un hecho de escasa relevancia, lo que resulta de la revisión de los principales medios de prensa de la época, que durante el período en cuestión, nada dicen sobre el viaje del último tranvía.
El año 1959
La primera fuente que nos ilustra acerca de la época del cierre de los servicios la encontramos en el compendio del V Congreso Luso Hispano Americano Filipino de Municipios de 1970, en el cual se puede leer:
En Santiago de Chile, la Compañía de Tracción absorbe las líneas de tranvías en 1933. La dotación de tranvías disminuye rápidamente de 157 vehículos en 1953, a 52 vehículos en 1958, que transportan 15,6 millones de pasajeros. La última línea termina por desaparecer en 1959.
Por otro lado, el primer libro que hace mención de una fecha exacta, es el Volumen 4 de “Los Ferrocarriles de Chile” (Wilfred Simms), escrito entre 1978 y 1988, y donde se señala que:
El rápido aumento de la propiedad privada de automóviles en los años posteriores a la guerra llevó a los últimos tranvías que operan hasta el 21 de febrero de 1959 (sic).
Un tiempo más tarde, sería el turno de Allen Morrisón, quien agrega mayores antecedentes en su obra “Tramways of Chile» (editada en Nueva York en 1992), señalando que la ETCE operó el último tranvía sobre el sistema tranviario principal de Santiago la noche del sábado 21 de febrero de 1959. El último carro corrió sobre la ruta 33 a través de las avenidas Matta y Blanco Encalada, siguiendo luego por calle García Reyes hasta el depósito de tranvías.
Es importante señalar que esta última cita ha sido utilizada como referencia en todas las investigaciones posteriores que han realizado especialmente los investigadores chilenos sobre tranvías, tales como Castillo, Mardones y Vila; Dos y Valente, entre otros, quienes la han citado ya desde su texto en inglés, como de su versión en español, editada por Ricaaventura el 2008.
¿De dónde proviene la referencia al sábado 21 de febrero de 1959?.
Durante años hemos intentamos confirmar la fecha del cierre, considerando que, investigada la misma en diversos archivos, nada aparecía. Así, el 2011 decidimos contactar al gran Allen Morrison para que nos aportar más antecedentes, entregándonos generosamente, como era su costumbre, 2 artículos del diario “La Tercera”. El primero, fechado el 17 de agosto de 1980, donde se puede leer “Los Carritos desataron una larga polémica en 1900 cuando comenzaron a circular en Santiago. En 1959 nadie dijo nada cuando los retiraron definitivamente”.
El segundo, del 11 de septiembre de 1983 que señala “Los tranvías sirvieron a la comunidad hasta el 21 de febrero de 1959, en que se retiró el último recorrido de las calles de Santiago”.
Si bien nunca hemos podido confirmar la fecha del último servicio, parece ser que lo único cierto, es que último viaje de un tranvía estatal fue un hecho de nula trascendencia, y aparentemente sin actos simbólicos.
El último tranvía de Santiago
Pese al cierre de la red de tranvías de la ETCE el año 1959, el título del “último tranvía de Santiago” se lo llevaría un tranvía particular llamado Ferrocarril Eléctrico Santiago Oeste, que circuló por Avenida San Pablo, entre Matucana y Blanqueado, aparentemente hasta agosto de 1966, y cuyos detalles dejaremos para otra oportunidad.
Santiago Vera Bustamante
Referencias:
Archivo Instituto Ferroviario de Chile.
Los viejos tranvías se van (Lira, Ramón. 1955).
Los tranvías se van. Lira Ramón (Revista En Viaje, junio de 1958).
Crónica del V Congreso Luso Hispano Americano Filipino de Municipios, Tomo II, página 300 (Instituto de Estudios de Administración Local. 1970).
Los Tranvías de Chile. 1858-1978 (Morrison, Allen. 2008).
El Estado sobre ruedas. Transporte Público, Política y Ciudad. La ETCE 1945-1981 (Castillo, Mardones y Vila. 2017). Especialmente las páginas 73, 110, 111, 147, 178 y 187.
Del centenario a los chilennials. 100 años de transformaciones y 25 tendencias que cambiaron Chile (Dosque Pedro; Valente José Tomás. 2018).
Los tranvías de Valparaíso. El primer sistema de transporte público del puerto (1863 – 1953) (Castillo, Vila).
Santiago en guerra: la crisis del transporte tranviario y el comienzo de la intervención estatal sobre la locomoción colectiva en la capital chilena, 1938-1941. (Mardones, Marcelo).
Decreto Nº 1494 del 27 de julio de 1942, del Ministerio de Obras Públicas y Vías de Comunicación.
Los sistemas de transporte público en Santiago. En: http://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-article-3706.html
Una historia de 89 años: Tranvías, entre incendios y nostalgia. En: https://www.mercuriovalpo.cl/prontus4_noticias/site/artic/20070624/pags/20070624012957.html (Consultado el 08.04.2020)
Trolleybus Valparaíso. En: http://trolleybusvalparaiso.blogspot.com/ (Consultado el 08.04.2020)
Recorridos de los antiguos tranvías de Santiago, más algunas imágenes (de época y de los restos de rieles en la actualidad). En: https://urbatorium.blogspot.com/2010/01/recorridos-de-los-antiguos-tranvias-de.html (Consultado el 08.04.2020)
Excelente reportaje. Yo tenia conocimiento del retiro de tranvias de la ETCE el año 1959 no la fecha exacta. Los tranvias de FESO circularon hasta 1964 , fecha que el alcalde de la epoca le molesto.los tranvias para poder ananchar la calle San Pablo. Quedaron almacenados en un galpon. No pago’ su dueño el arriendo y en 1968 con un camion sacaron los tranvias desalojando el recinto y los «tiraron» a calle San Pablo. Comenzo el desmantelamiento y vandalismo de las unidades , lo ocupaban ebrios y delincuentes las carrocerias ,hasta que al final fueron llevados a la estacion Yungay para su chatarreo y asi termino lamentablemente una historia de años.Tengo fotos que en su oportunidad se la envie’ a Allen Morrison
Fue un gran error histórico eliminar los tranvías, igual que el desmantelamiento y desguase del ferrocarril en todo Chile y que hoy lucha denodadamente en volver.
Hoy los tranvias operan exitosamente en muchas ciudades europeas, como un frente de protección ecologico
El tranvía no es un medio de transporte urbano del pasado, sino del futuro: Al correr sobre rieles, tiene menor adhesión lo cual demanda menos energía que los vehículos de ruedas de goma. Tiene frenado regenerativo de electricidad, por lo cual «devuelve» energía a la red eléctrica con cada frenado y es el medio de transporte de superficie que más pasajeros puede trasladar por franja de terreno. Además utiliza una energía no contaminante y renovable como es la electricidad. Desgraciadamente en los 40 y 50 no se hicieron tales consideraciones, dilapidando la extensa y espesa red tranviaria de Santiago.
El tranvía no es un medio de transporte urbano del pasado, sino del futuro: Al correr sobre rieles, tiene menor adhesión lo cual demanda menos energía que los vehículos de ruedas de goma. Tiene frenado regenerativo de electricidad, por lo cual «devuelve» energía a la red eléctrica con cada frenado y es el medio de transporte de superficie que más pasajeros puede trasladar por franja de terreno. Además utiliza una energía no contaminante y renovable como es la electricidad. Desgraciadamente en los 40 y 50 no se hicieron tales consideraciones, dilapidando la extensa y espesa red tranviaria de Santiago.
El tranvía no es un medio de transporte urbano del pasado, sino del futuro: Al correr sobre rieles, tiene menor adhesión lo cual demanda menos energía que los vehículos de ruedas de goma. Tiene frenado regenerativo de electricidad, por lo cual «devuelve» energía a la red eléctrica con cada frenado y es el medio de transporte de superficie que más pasajeros puede trasladar por franja de terreno. Además utiliza una energía no contaminante y renovable como es la electricidad. Desgraciadamente en los 40 y 50 no se hicieron tales consideraciones, dilapidando la extensa y espesa red tranviaria de Santiago.